lunes, 10 de noviembre de 2008

Necedad y Prudencia: Extracto de la Reflexión del Pastor Lisandro Orlov, Argentina




Amigos y amigas,

Comparto acá un fragmento de un texto escrito por el Pastor Luterano Lisandro Orlov, residente en Argentina, y lo dejo para la reflexión, como siempre.


EVANGELIO Mateo 25, 1-13

Traducción: El Libro del Pueblo de Dios. La Biblia. Ediciones Paulinas. Madrid. Buenos Aires. 1990

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: el Reino de los Cielos será semejante a diez jóvenes que fueron con sus lámparas al encuentro del esposo. Cinco de ellas eran necias y cinco, prudentes. Las necias tomaron sus lámparas, pero sin proveerse de aceite, mientras que las prudentes tomaron sus lámparas y también llenaron de aceite sus frascos. Como el esposo se hacía esperar, les entró sueño a todas y se quedaron dormidas. Pero a medianoche se oyó un grito: 'Ya viene el esposo, salgan a su encuentro'. Entonces las jóvenes se despertaron y prepararon sus lámparas. Las necias dijeron a las prudentes: '¿Podrían darnos un poco de aceite, porque nuestras lámparas se apagan?'. Pero estas les respondieron: 'No va a alcanzar para todas. Es mejor que vayan a comprarlo al mercado'. Mientras tanto, llegó el esposo: las que estaban preparadas entraron con él en la sala nupcial y se cerró la puerta. Después llegaron las otras jóvenes y dijeron: 'Señor, señor, ábrenos', pero él respondió: 'Les aseguro que no las conozco'. Estén prevenidos, porque no saben el día ni la hora. El Evangelio del Señor.



No podemos aproximarnos a este texto con ingenuidad o simplicidad. En primer lugar debo manifestar mi dificultad en aceptar una perspectiva tan arraigada en el pensamiento religioso de cualquier color y de todos los tiempos que mira al mundo con el objetivo de clasificar y separar. En el contexto de la epidemia del vih y del sida me resulta sumamente escandaloso mirar a aquellas personas que tienen otros criterios, otras opciones y otras costumbres desde un extraño sentimiento de superioridad incompatible con el Evangelio. Esa forma de comprender el mundo como si solo existieran dos caminos, dos realidades, clasificando a los seres humanos en buenos y malos, puros e impuros, creyentes y ateos, ricos y pobres, del norte y del sur, blancos y negros, hombres y mujeres, heteros y homosexuales, fieles y promiscuos, usuarios y limpios. Este terrible dualismo ha sido la fuente de muchos estigmas y de todas las discriminaciones. Entonces tomemos la decisión de terminar en considerarnos a nosotros y nosotras como ciudadanos del cielo y todas y todos los demás, las y los diferentes, como perteneciendo a este mundo mientras nosotros nos ubicamos en una dimensión desconocida. Todos pertenecemos al mismo mundo amado por Aquel que todo ha creado a su imagen y semejanza. Todos y todas estamos convocados a ser parte del mismo espacio de liberación que llamamos Reino de Dios. Es necesario superar ahora y terminar aquí con esa perspectiva dualista en nuestra comprensión de nuestras relaciones humanas. La realidad y nuestras propias vidas tienen muchos más matices, colores y brillos.

Tengo una querida amiga que siempre me dice que las chicas buenas van a la iglesia y que las malas van a todas partes y cada vez que se despide de mi me dice que me porte bien y que si no lo hago que la invite. Este texto del evangelio nos muestra esa comunión de situación en la que nuestra existencia nos ha ubicado en una realidad compleja y diversa. Necias y prudentes, necios y prudentes compartimos la misma historia y el mismo proyecto, todos y todas formamos parte de un mismo y único espacio. Este texto nos muestra que ambos grupos se quedaron dormidos y nadie es condenado por haberlo hecho. Por lo tanto ese no puede ser el centro y núcleo del relato, pero nos muestra algo que la teología luterana viene afirmando desde hace varios siglos pero que aún parece que no ha tomado toda la dimensión que merece en nuestro pensamiento y en nuestra acción pastoral. Siempre hemos afirmado que los seres humanos somos “simul justus et peccator” para decirlo en formula teológica, es decir, que siempre y aún en medio de nuestro bautismo y conversión vivimos un proceso permanente, dinámico y constante de tensión y lucha en nuestra condición ambigua de ser salvados y a la vez permanecer pecadores, puros e impuros al mismo tiempo, fieles e inconstantes en todo, buenos y malos, despiertos y dormidos, necios y prudentes. Este grupo de señoritas comparten esa básica realidad y la comparten no solo entre ellas sino que la comparten con nosotros y nosotras que a la vez las compartimos con todas las personas que viven con vih o sida y con todas y todos los estigmatizados y excluidos del mundo. Por lo tanto les invito a abandonar esas miradas sospechosamente dualistas que condicionan nuestras relaciones con los seres humanos y a tener una mirada un poco más positiva y un poco más realista.

3 comentarios:

Patrick dijo...

Me encanta que me mandes esas reflexiones por mail xD

me parece genial que tambien las pngas aqui en el blog.

Me gusta más la última que me mandaste, sobre Cristo Rey, que separará obejas de cabras, y a quien acogemos siempre que acogemos a los más pequeños de nuestros hermanos.

Tengo ua pregunta. ¿por qué siempre se refiere a la epidemia del vih?
es verdad que concuerda cpn la exhortación, ¿pero hay una razón más específica? ¿A quiénes se dirige el pastor?

Bueno. Hasta pronto

Pamela Catalán Segovia dijo...

Hola Patrick, disculpa que no te haya respondido antes. He tenido mucha pega.

Lisandro Orlov trabaja con personas que padecen vih y también existe una pastoral ecuménica que trata el tema.

Y ello se justifica porque las personas que padecen vih pierden mucho, quedan estigmatizados socialmente y además abandonados por sus familias, tal como ocurría con los leprosos en tiempos de Jesús. Sin embargo, la enfermedad como mal, tiene cosas diferentes, por supuesto; pero es, yo creo, responsabilidad de todos, apoyar a los que son discriminados y rechazados, o vulnerados en sus derechos.

Bueno, Lisandro se ocupa mucho de ese tema en particular, así como habrá otros que les preocupará la violencia intrafamiliar u otros temas.

Eso.

Anónimo dijo...

HOLA PAME, ESTA MUY BUENA LA REFLEXION DE LISANDRO, SOLO TE PIDO QUE ME ENVIES A MI MAIL SI PUEDES, O SI PUEDES REENVIARLE MI MAIL A QUIEN LOS ENVIA DIRECTAMENTE, PUES PESE A QUE ME ANOTE O ME LLEGAN

PATRICK: HABLA SIEMPRE DEL VIH PUES ES EL TEMA DE LISANDRO, EL SE DEDICA A ELLOA, A TRABAJAR CON PERSONAS QUE LO TIENEN Y A GENERAR PENSAMIENTO TEOLOGICO POR DECIRLO DE ALGUNA FORMA EN ESE SENTIDO.

OTRA COSA PAME, SI PUEDS CONFIRMARME CUANDO ES EL TEMA DEL TALLER EN EL SUR, PUES PRETENDO IR PORFIS

UN ABRAZO
PABLO RIOS